Ciudades inteligentes

A lo largo de la historia de la humanidad han surgido diferentes revoluciones industriales que trajeron grandes avances a la sociedad. Doscientos treinta y dos años después de la primera revolución industrial, la sociedad ha vivido transformaciones de todo tipo, desde la invención de la máquina de vapor, la electricidad, los antibióticos, vacunas, la radio, biotecnología, internet, robots, entre otros. Todos estos avances nos han llevado al Internet de las Cosas y la Industria 4.0.

Desde hace unos años, vivimos ya en la cuarta revolución industrial, la cual es la aplicación del Internet a la industria usando las redes de comunicación, tecnología de la información, dispositivos, sensores y sistemas inteligentes que habilitan la comunicación entre máquinas (M2M).

Con la ayuda del Internet de las Cosas, las ciudades actuales ahora pueden ser inteligentes, es decir, usar la tecnología para el beneficio de la población. Estas ciudades planifican e integran tecnología en sus productos y servicios con los siguientes objetivos:

  • Mejorar la calidad de vida
  • Incrementar la productividad del sector empresarial
  • Disminuir el consumo energético
  • Gestionar los recursos de una forma eficiente
  • Reducir emisión de CO2

Una ciudad inteligente debe cubrir las áreas de seguridad, turismo, educación, salud y servicios públicos mediante la implementación de tecnología para alcanzar una gestión eficiente.

La innovación tecnológica es la clave para el desarrollo de proyectos que permitan optimizar los procesos de una ciudad, es decir, planificar mejor la circulación de vehículos, disminuir el consumo energético, mejorar la recolección de desechos, optimizar la planificación urbana, entre otros.

Algunos ejemplos actuales de ciudad inteligente son las luminarias públicas que utilizan sensores de movimiento; los estacionamientos inteligentes que notifican los espacios vacíos; tecnología que mejora la circulación vial; aumento de uso de energías renovables como paneles solares y la economía digital con el pago de servicios y productos mediante el uso de una dispositivo móvil, por mencionar algunos.

Vivimos en la era de la innovación, donde cada día surge una nueva idea que se convierte en una creación tecnológica con grandes beneficios para la sociedad, por esta razón, las ciudades deben contar con las herramientas necesarias para apoyar a la industria y a la sociedad.

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